Luciendo sus mejores trajes de pana y luces, con tocados de cuento de hadas, tacones y zapatillas que brillan como los diamantes, porque la salsa en la ‘Capital cultural de Sudamérica’ es una oda a este género, cientos de bailarines profesionales caleños se dieron cita en la segunda jornada de las clasificatorias al decimocuarto ‘Festival Mundial de Salsa Cali 2019’.
El astro sol y la brisa del Pacífico fueron testigos y previeron la magia, el talento, la pasión y el desborde de emociones que se tomaron la pista e inundaron a los asistentes, cuando un solista, una pareja o un grupo de salsa caleña despliega el punta y talón, el paso básico, la clave, el dinos, el punta garza o la acrobacia.
Comentó María del Carmen Loaiza: “Epa, salió la pesada” al ver en escenario a una de las parejas por categoría Salsa Cabaret y todo porque fue pisar pista para empezar las majestuosas acrobacias, figuras, alzadas y hasta cargadas, esas mismas que hizo que doña María gritara de principio a fin y se levantará al final de la presentación a ovacionar a los jóvenes bailarines.
“Tan hermoso que es ver la calidad de bailarines que tenemos aquí, estos muchachos muestran tanta entrega y pasión en lo que hacen que lo contagian a uno de todo eso. Aquí hay madera y hay que apoyar todo este arte, por eso cada año estoy aquí con mis hijos y nietos gozando de la verdadera cara de una ciudad tan bella como lo es, esta”, agregó.
Pasaban las horas y aunque el sol se despedía para darle paso a la noche, nadie se quería mover del Teatro al Aire Libre Los Cristales, porque en Cali se respira salsa y cuando sus protagonistas están más que ‘azotando baldosa’, en su mejor gala al público no le queda más que deleitarse, sentirse orgullo y aplaudir que en esta ciudad existe un estilo, una Salsa estilo caleño como el que bailan los solistas por segundo año consecutivo en esta cita internacional.
Ese fue el caso de José David Tulante, un bailarín que participó en la categoría Solista profesional baile estilo caleño y quien se adueñó de la tarde noche ejecutando movimientos y una rutina dancística cimentada en el estilo de su ciudad.
Para Wilmar Martínez, residente del barrio Los Libertadores, la salsa es algo más que un baile, es vida. Tal y como lo explicó: “Uno cuando ve bailar o cuando uno se anima a salir a echar paso, siente un calor que lo hace sacar pecho como pavo real. La salsa es innata aquí, es como un empujón de vida y estos pelaos lo demuestran cada año, no solo en este Festival sino en otros países, porque cuando suena una salsa la gente no puede evitar pensar en Cali-Colombia”.
Ya solo quedan 15 días para que la administración del alcalde Maurice Armitage realice del 25 al 29 de septiembre el decimocuarto Festival Mundial de Salsa, evento que hace parte de la Temporada de Festivales de Cali en la que propios y visitantes disfrutarán y confirmarán porque a Cali se le reconoce como la ‘Capital mundial de la salsa’.
Fuente: www.cali.gov.co